Gustavo Petro, el ganador de las elecciones presidenciales en Colombia, a pesar de su pasado en la guerrilla, se incorporó hace 30 años a la vida democrática y llegó a ser senador y alcalde en Colombia. El pensamiento izquierdista de Petro lleva a algunas personas a pensar que es una tragedia que el personaje gobierne el país, por lo que Juan Carlos Fernández, en su programa A Punto habló sobre este tema.
El periodista, manifestó que a pesar de la inclinación de izquierda del elegido presidente de Colombia, la mayoría del pueblo colombiano votó por él y esto se debe al cambio que desea la población del país.
Así como muchas de las naciones de Latinoamérica y el mundo felicitaron al nuevo presidente por su victoria, desde Venezuela tanto gobierno como oposición deben “buscar las mejores relaciones con Petro”, dijo Fernández, manifestando que especialmente la oposición venezolana debe buscar reuniones con el mandatario para entenderse, porque aunque su pensamiento no vaya acorde con el de la oposición fue una realidad que eligió el pueblo de Colombia y se deben mantener las mejores relaciones, que además beneficien a los ciudadanos venezolanos.
Independientemente de los presidentes de los países y de sus ideologías políticas lo ideal es entenderse porque la política no puede ser vista “desde la rabia y del odio”.
“Yo deseo que Petro abra la frontera” comunicó Juan Carlos, esto con el fin de tener relaciones consulares, para que colombianos y venezolanos puedan asistir a sus respectivos consulados a realizar su pasaporte y apostillas; para que le economía en ambos lados de la frontera se reactive y ambos países sean beneficiados.
Fernández hizo el planteamiento en su reflexión que no todos los izquierdistas son malos, ni todos los de derecha son buenos, porque “si el pueblo de Colombia decidió salir de Duque y de Uribe sus razones tendrán”, refiriéndose a que quizás estos gobernantes no resolvieron los problemas de los ciudadanos colombianos.
Venezuela
Los dirigentes políticos venezolanos, de ambos bandos deben prestar atención al pueblo, para notar los problemas reales y las cosas que deben atenderse con prioridad, “y si los políticos no se conectan con esos problemas, nos cambian, como cambiaron a la clase política colombiana”.
Si los políticos siguen pensando en sus propios intereses y no en las necesidades de las personas, serán cambiados como pasó en Colombia.
En conclusión, a pesar de que el gobernante de izquierda ganó la presidencia en Colombia, no es algo en lo que los venezolanos puedan intervenir, mas que en llevar buenas relaciones, y continuar trabajando para que en el futuro Venezuela pueda elegir a su propio gobernante.
Redacción: Paola Rivero